Actualmente
es un término utilizado en el mundo empresarial y que podríamos traducirlo como
“Arrancar”, “Emprender” o
sencillamente es “Montar un Negocio Nuevo”.
Ahora bien, como su nombre lo indica se refiere a ideas de negocios que hasta
ahora comienzan o apenas están en construcción, o sea, que son empresas que
basan su apoyo en la tecnología y la calidad, además con una gran proyección,
pese a su corta trayectoria y falta de recursos o la falta de financiación con
la que cuenta cualquier negocio que va a comenzar.
Estas
Startups pueden ser una gran aventura, aunque se refieren a compañías de cualquier ámbito, básicamente
se utilizan para aquellas que tienen una fuerte composición tecnológica y
usualmente relacionadas con el mundo del internet, por esta razón se
diferencian de otras empresas nuevas en su probabilidad de crecimiento y
necesidad de capital.
Como
ventajas de estas empresas tecnológicas y de internet son sus costos bajos para
su desarrollo en comparación con empresas de otros ámbitos. Por tal razón la
financiación es mucho menor, facilitando así el crecimiento a mediano y largo
plazo.
¿Quién
Invierte y cómo es la transición hacia su madurez?
Las
fuentes de financiación para la gran mayoría de Startups no son las
tradicionales, como los créditos bancarios y sus similares, en este caso el
capital es aportado por inversionistas que tienen a cambio un porcentaje de la
empresa para aquellos casos en que la Startup no cuenta con un modelo de
negocio inicial durante sus primeros meses de vida.
Como
ejemplos a nivel internacional, tenemos a Google, Twitter, Facebook que
comenzaron siendo Startups y con el paso de los años se convirtieron en
gigantes empresas con muchos empleados y obteniendo importantes ingresos y
beneficios.
¿Las
Startups tienen modelo de negocio?...
Inicialmente
un modelo de negocio,
es el mecanismo por el cual un negocio busca
generar ingresos y beneficios. Es un resumen de cómo una compañía planifica servir a sus
clientes. Así que vemos muchos ejemplos
de Startups que son creadas sin un modelo de negocio, incluso siendo vendidas
antes de encontrar uno.
Instagram es
uno de los casos más conocidos, cuando hace ya algún tiempo fue comprada por Facebook
por más de 700 millones de dólares. Sin un modelo de negocio establecido, fue comprada
por Mark Zuckerberg… ¿Por qué?...bueno por las posibilidades de crecimiento que
la empresa de Kevin Systrom mostraba en esos precisos momentos.
Aquí cabe anotar que un importante
número de Startups terminan siendo vendidas a otras empresas más grandes y
aunque todo parezca un cuento de hadas, la verdad es que la gran mayoría de
Startups mueren a los pocos meses o años de haber sido creadas. Un estudio publicado
en septiembre de 2012 por Shikhar Ghosh y recogido en el Wall Street Journal afirma que tres
de cada cuatro startups financiadas por Venture Capital no consiguen devolver
el dinero prestado. Cifras que en cualquier otro contexto
empresarial podrían asustar pero que, dados los bajos costes que en la mayoría
de ocasiones supone poner en marcha una startup, no resultan de mucho impacto.
Espero
que en este artículo hayas encontrado la información que necesitabas y que te
pueda servir de base para crear tu propio emprendimiento y si es así, entonces
mucho ánimo y manos a la obra.
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